El otro día os enseñé una mermelada de zanahorias y naranja que me había salido espectacular… pues hoy os cuento el bizcocho que hice después, haciendo uso de la mermelada.

Es similar a un carrot cake, pero mucho más jugoso. Me recordó mucho al bizcocho de naranjas que hice el año pasado (y que tengo que repetir que hace mucho que no lo hago!)

Ingredientes:
Mermelada de zanahorias y naranja (si no tenéis casera, podéis utilizar una mermelada de naranja, por ejemplo, y si es de las que tienen trozos, mejor)
2 huevos
50 c.c. de aceite de girasol
125 grs. de harina de trigo
4 cucharadas soperas colmadas de azúcar moreno
1 puñado de nueces peladas
Canela molida
1 cucharadita de levadura en polvo
1 pizca de sal

Nos ponemos manos a la obra!!
Precalentamos el horno a 175-180 grados.
Mezclamos  harina, levadura, canela, pizca de sal, tamizamos y reservamos.
Ponemos en un bol los huevos, batimos muy bien  añadiendo a la vez, en hilillo, el aceite de girasol hasta integrar todo.
A continuación el azúcar moreno y seguimos batiendo hasta que notemos que se ha disuelto.
Seguidamente 4 cucharadas soperas bien llenas de mermelada de zanahoria, seguimos batiendo.
A esta mezcla le añadiremos los ingredientes secos que teníamos reservados,  lo haremos con movimientos envolventes y poco a poco.
Por último le ponemos las nueces peladas que iremos troceando a mano, mezclamos.
Vertemos la masa en un molde engrasado.
Horneamos hasta que, al pinchar con una brocheta, ésta salga limpia.
Dejamos templar, desmoldamos y terminamos de enfriar sobre rejilla.
Lo envolvemos en film transparente e introducimos en el frigo ( a mí me gusta más al día siguiente que se potencian los sabores).

Y a disfrutar!!