Seguimos en el mundo brownie, bloques, cubos variados y recetas americanas de esas que me fascinan y que engordan tropecientos kilos. Sí señor! viva la Operación Bikini a la inversa!
Yo, a diferencia del resto del mundo, en verano me pongo como una foca,y para el invierno ya he adelgazado. Genial. El mundo al revés. Claro, que llevo unas semanas que aún no me atrevo a sacar las piernas de los pantalones. Y como siga con este ritmo, me temo que me veo en vaqueros hasta octubre.
Por el momento, he preparado una súper bomba calórica cuya receta guardaba apuntada en papel por uno de mis cuadernos y que, sinceramente, no recuerdo de dónde la saqué. Nunca me había planteado hacerla por eso de no tener una máquina que triturara todo… pero con mi maravillosa TMX es súper fácil… (sí, algunos sé que me odiáis por recordarlo constantemente, pero es lo que tiene, es la emoción de la novedad…)
¿Qué necesitamos?
1 caja de galletas cracker Ritz, unas 60 crackers en total
1 taza y media de caramelos troceados
1 lata de leche condensada (14 oz)
1 taza y media de buttercream
Nos ponemos manos a la obra!!
Precalentamos el horno a 180°.
Forramos un molde con papel de hornear (yo últimamente siempre utilizo el mismo molde cuadrado de metal, me encanta la forma y el resultado que da)
Trituramos las galletas saladas (yo lo hice con mi maravillosa Thermomix) pero también lo podéis hacer machacándolas en una bolsa de plástico con un rodillo de madera.
Trituramos los caramelos Toffee y los mezclamos con las migas de las galletas saladas. Lo vertemos en el molde y cubrimos todo con un bote de leche condensada hasta que quede todo mezclado y cubierto.
Movemos un poco y golpeamos el molde contra la mesa hasta que esté todo incorporado.
Horneamos durante 15-20 minutos hasta que los bordes comiencen a dorarse. Lo sacamos del horno y esperamos a que se enfríe del todo y entonces lo cubrimos con buttercream.
Os recuerdo la receta del buttercream, aunque la he puesto en más de un post…
¿Qué necesitamos?
100 gr de mantequilla a temperatura ambiente
300 gr de azúcar glass
1 cucharada de vainilla
Y cómo se hace… tan fácil como batir todo con una batidora de varillas hasta obtener una mezcla homogénea.
Cuando los cupcakes estén totalmente fríos, los decoramos con el buttercream y espolvoreamos con las semillas de amapola… y a disfrutar!
Lo cortamos en cuadraditos, y a engordar!!!
Es sencillamente ESPECTACULAR!
Hola 🙂 Te he dejado un premio en mi blog! Pásate a por el!!!
http://demiblogatucocina.com/2013/06/24/regresooo-y-con-un-mogollon-de-premios-nuevos/
wola!!! que ilusión! y que sorpresa! mil graciasssss
un beso!!
Pues sí, tiene que estar riquísimo, pero es como una bomba de relojería, miedo me da pensar en todas esas calorías 😉
Un abrazo
Cristina
Hola, espero que te guste lo que te he dejado en mi blog.
http://tastetsdebruixa.wordpress.com/2013/06/22/otro-otro-otro-premio/
Núria.
Hola Nuria!! mil gracias!! que ilusión!! ay madre y yo de bólido esta semana, a ver si me da tiempo a postearlo! un besoooo
Para darse un festin…
Saludos