Hoy os quiero enseñar unos grisines súper ricos con una receta sacada del libro Pan y Bollería con Thermomix.

La verdad es que una de las cosas maravillosas que tiene este robot es la facilidad con la que haces las masas. Os encontraréis defensores y detractores de la Thermomix para amasar pero lo que es cierto es que, si no tenéis espacio en la cocina para tener 2 aparatos (como es mi caso) con este podréis hacer maravillas sin problemas.

¿Qué necesitamos?
500 gr. de harina de fuerza
1 cucharadita de sal (10 g)
20 gr. de levadura prensada fresca
1 cucharada de miel (25 g)
40 gr. de aceite de oliva virgen extra
280 gr. de agua
Para decorar: pipas y semillas de amapola

Nos ponemos manos a la obra!
Tamizamos la harina con la sal 10 seg/vel 5. Añadimos el resto de ingredientes y amasamos 5 minutos, vaso cerrado, velocidad espiga.
Sacamos la masa del vaso y la ponemos en un bol aceitado. Aplastamos la masa sobre el bol con las manos y la pincelamos con aceite. Lo tapamos y lo dejamos reposar 1h aproximadamente.

Precalentamos el horno a 220ºC, y forramos un par de bandejas con papel de hornear. Si queremos que quede más crujiente, podemos poner en el horno un bol de cristal con con agua, para que humidifique.

Desgasificamos la masa aplastando con la mano y estiramos con un rodillo. Espolvoreamos la masa estirada con las semillas y le pasamos el rodillo para que se pegue bien a la masa.

Con un cuchillo, cortamos tiras de 2 cm, y cogemos los colines por los extremos y estiramos para acabar de darles forma y los ponemos sobre el papel de horno en la bandeja.

Horneamos de 10 a 15 minutos a 220ºC , en función del grosor. Y en cuanto se enfríen, a disfrutar!!